La Comisión Consultiva de Festejos Taurinos de la Comunitat Valenciana reclamó unánimemente ayer, martes 18 de enero, la derogación de la normativa que impone el segundo médico en los festejos de “bou al carrer”, tras la entrada en vigor el pasado día 1 de enero esta modificación de la ley de espectáculos 14/2010.
Del mismo modo, se solicitó que se iniciara el debate desde cero, con el consenso de todas las partes implicadas en estos eventos, y en el seno de esta comisión.
Esta sesión fue presidida por el director general de Emergencias de la Generalitat, José María Ángel, y personal de las consellerias de Agricultura y Sanidad, además de representantes de ayuntamientos, colegios de arquitectos, veterinarios, aparejadores, médicos, asociaciones de ganaderos y aficionados taurinos. En representación de los enfermeros de la Comunitat, y como portavoz del Consejo de Enfermería de la Comunitat Valenciana (CECOVA), asistió a esta reunión el enfermero, vocal de festejos taurinos del Colegio Oficial de Enfermeros de Castellón, Luis Garnes.
Firma de documento
Los asistentes firmaron antes de concluir la reunión un documento en el que argumentaron que la aplicación directa de esta disposición iba a provocar disfuncionalidades importantes en la organización de los festejos y que no había suficiente personal para cubrir los cerca de 9.000 festejos taurinos que anualmente se celebraban en la Comunitat Valenciana.
Desde el Colegio Oficial de Enfermeros de Castellón han recordado que esta polémica se podría haber evitado de haber tenido en consideración las alegaciones que a fecha de 12 de enero de 2017 se presentaron con motivo de la modificación de este decreto.
En estas alegaciones se detalló que el “Capítulo IV, artículo 21, punto 1º, relativo al personal, podría recoger que el número de profesionales sanitarios que participasen en el festejo dependiera del evento, diferenciando así entre distintos tipos de festejos taurinos con sus necesidades específicas”. El ente profesional quería concretar a través de esta alegación que tan importante como garantizar la seguridad durante los festejos taurinos, lo es adaptarse a la propia idiosincrasia del evento.