La Comunitat Valenciana diagnostica cerca de 2.500 nuevos casos anuales de epilepsia, de hecho, en el conjunto de las tres provincias valencianas están registradas en el Sistema de Información Ambulatoria (SIA) un total de 53.605 personas con diagnóstico de epilepsia y ataques recurrentes.
Según han detallado desde la conselleria de Sanitat Universal i Salut Pública, la prevalencia de la enfermedad en la Comunitat ronda los 4,5 a 8 casos por cada 1.000 habitantes, similar a otros países europeos. Por edades, 44.542 de las personas diagnosticadas son mayores de 19 años y 9.063 no superan esa edad. Cabe destacar que un 6% de las alertas y urgencias escolares atendidas corresponden a crisis epilépticas.
Consciente de esta situación conselleria de Sanitat Universal i Salut Pública ha presentado el ‘Plan para la Atención a la Epilepsia en el Sistema Sanitario Público de la Comunitat Valenciana 2019-2023’, una guía para ofrecer una atención sanitaria integral y adecuada a las personas afectadas, con el objetivo de mejorar su calidad de vida.
En línea con lo que señala la OMS, desde la conselleria han subrayado que esta alteración del cerebro caracterizada por la predisposición a generar crisis epilépticas recurrentes es un importante problema de salud pública, por su elevada prevalencia y repercusión en la vida de las personas y por sus consecuencias neurobiológicas, cognitivas, psicológicas y sociales. Además, según ha detallado, existe un estigma social asociado a menudo con esta enfermedad, y ha destacado que, pese a que el 70% de los casos de epilepsia responden al tratamiento médico y permiten al afectado llevar una vida familiar y socio-laboral algo más normalizada, hay un 30% de personas que presentan epilepsia refractaria o resistente a los fármacos, y que precisan una atención más laboriosa. En este segundo grupo se estima en un 7% el procentaje de personas candidatas a cirugía como tratamiento alternativo.
Atención integral y en red
Entre las acciones que incluye el plan, la conselleria de Sanitat Universal i Salut Pública ha destacado: impulsar la constitución de unidades médicas de epilepsia o consultas monográficas de epilepsia en hospitales o centros de especialidades donde se detecte esa necesidad; impulsar el diagnóstico precoz y el consejo genético -hasta un 25% de las crisis pasan inadvertidas a pacientes y familiares-; o mejorar los tiempos de acceso a la consulta de Neurología desde la sospecha de epilepsia en Atención Primaria, procurando no superar los 15 días desde su derivación.
El plan contempla también la publicación de convocatorias de ayudas públicas para la investigación en epilepsia; reforzar la formación de los profesionales a través de la EVES; crear portales específicos sobre epilepsia para mejorar el conocimiento del paciente e impulsar las subvenciones dirigidas a asociaciones de pacientes.
Para mejorar la coordinación interdepartamental se creará una comisión intersectorial en materia de sanidad, servicios sociales, educación y trabajo. Se promoverá además la elaboración del ‘informe clínico unificado para facilitar al paciente el acceso a los recursos sociales, educativos y laborales. El documento incluye acciones específicas para el anciano con epilepsia, y los menores en el medio escolar.
El grupo de elaboración del plan, integrado por los coordinadores y expertos en epilepsia, será el encargado de impulsar y coordinar las acciones, así como de su evaluación. Integran este grupo neurólogos, neurocirujanos, enfermeras, médicos de familia y neuropediatras, entre otros. Es importante señalar además que en su elaboración han participado no solo profesionales sanitarios sino también representantes de la asociación de epilepsia de la Comunitat Valenciana (Alce). COECS / GVA.