El pasado 1 de febrero se celebró en el salón de actos del Colegio de Enfermería de Valencia una sesión informativa sobre la especialidad Enfermería de Salud Mental en la Comunidad Valenciana que contó con la presencia del presidente del CECOVA, José Antonio Ávila, del presidente de la Asociación Española de Enfermería en Salud Mental (AEESME), Francisco Megías, de dos representantes de AEESME en la Comunidad Valenciana, María José Abad y Vanessa Sánchez, así como de José Antonio López Cócera, responsable de la Oficina Autonómica de Salud Mental de la Conselleria de Sanidad Universal y Salud Pública.
Representando a la Administración autonómica, José Antonio López Cócera recordó que desde el pasado 1 de diciembre su Oficina tiene la instrucción del Departamento de Recursos Humanos de la Conselleria de Sanidad para la creación de plazas de enfermeras especialistas en Salud Mental. Calificó el momento de “histórico” para las especialistas en Salud Mental, pese a que no estableció plazos para la creación de plazas, ni la forma de hacerlo, ya que, según ha explicado, no se pueden convocar bolsas de trabajo extraordinarias porque existe una abierta en vigor.
Asimismo, López Cócera señaló que la bolsa de trabajo para esta especialidad está activa desde 2016, cuando se contrataron dos plazas, una en Valencia y otra en Alicante, más otras dos que ya disfrutaban de este reconocimiento y retribución, aunque no aclaró las cuantías de los salarios de las nuevas especialistas.
Por su parte, José Antonio Ávila mostró su “escepticismo” con la resolución del problema de la especialidad de Salud Mental, porque “con las otras 6 especialidades enfermeras estamos viviendo un recorrido parecido en lo que respecta a la falta de reconocimiento”. En este sentido, recalcó la impotencia que se vive desde el organismo colegial, pues “pese al trabajo de concienciación reclamando la especialidad en Salud Mental no hemos conseguido que las instituciones adopten nuevas decisiones”.
Ávila señaló que “desde el reconocimiento de las especialidades enfermeras en 1985, su desarrollo fue tan lento que solo con manifestaciones conseguimos un nuevo decreto en 2015”. Así, recalcó que “si con todo nuestro esfuerzo en los despachos de la Administración y en la labor de comunicación no hemos conseguido que nuestro mensaje cale, habrá que plantearse movilizaciones”.
Francisco Megías, que ejerció de moderador de la sesión, señaló que “es vergonzoso que después de 20 años de la existencia del EIR existan especialidades sin plaza y, por tanto, sin cobrar lo que les corresponde”. Megías achacó el problema al Ministerio de Sanidad que “consiente que las enfermeras hagan una residencia por sueldos ridículos para lograr una especialidad que luego no se les reconoce en forma de plaza”.
Desde AEESME Comunidad Valenciana, Vanessa Sánchez realizó una presentación-resumen de los principales hitos y actuaciones de la asociación en la Comunidad Valenciana “que pasan siempre por defender la calidad asistencial y los derechos de los pacientes que merecen ser tratados por especialistas”. En esta línea, defendió las acciones docentes y asistenciales que han promovido, así como la colaboración con Sanidad participando en el grupo de trabajo para prevención de suicidios.
Por su parte, y desde este mismo colectivo, María José Abad recordó que ahora la especialidad tiene suficiente masa crítica como para generar inquietud y abordar la especialidad enfermera. Además, dijo que “si la Administración muestra su colaboración y abre una rendija de esperanza la aprovecharemos, pero si no colabora soy partidaria de recurrir a las manifestaciones a las puertas de la Conselleria”. CECOVA/COECS