Investigadores han mapeado los genomas de las tenias para revelar posibles objetivos farmacológicos sobre los que los medicamentos existentes podrían actuar. Los genomas decodificados en esta investigación, publicada en ‘Nature’, proporcionan un nuevo recurso que ofrece formas más rápidas de desarrollar tratamientos urgentes y eficaces para las enfermedades debilitantes que causa este parásito: equinococosis y cisticercosis.
El equipo de científicos secuenció el genoma de cuatro especies de tenia para explorar la genética y la biología subyacente de este parásito inusual. Como adulto puede vivir relativamente inofensivo en el intestino, pero sus larvas pueden propagarse a través del cuerpo con efectos devastadores, ya que forman quistes en los órganos internos o tejidos de seres humanos y otros animales y proliferar y crecen en el cuerpo, como el cáncer, causando en algunas especies complicaciones como la ceguera y la epilepsia e incluso la muerte.
«Las infecciones de tenia son frecuentes en todo el mundo y su carga devastadora es comparable a la de la esclerosis múltiple o el melanoma maligno», explicó el autor principal, Matthew Berriman, del ‘Wellcome Trust Sanger Institute’, en Reino Unido. «Estas secuencias del genoma nos están ayudando a identificar inmediatamente nuevas dianas para el tratamiento de drogas que tanto necesita», agrega.
Además, este experto señala que la exploración de las secuencias de ADN completas de los parásitos están impulsando el conocimiento de su biología compleja, ayudando a la comunidad de investigadores a centrarse en los candidatos a fármacos más eficaces. Normalmente, los investigadores identifican nuevas dianas para los fármacos con el fin combatir las enfermedades mediante la comparación de la secuencia del genoma de un patógeno con el ADN del huésped humano para encontrar diferencias entre ellos.
Sin embargo, esta vez el equipo buscó deliberadamente similitudes entre los seres humanos y el parásito, ya que ambos son pluricelulares y la tenia es evolutivamente semejante a los humanos. Al encontrar parecidos, los científicos detectaron los objetivos de las actividades de explotación de los medicamentos existentes, por lo que la identificación de los tratamientos que ya están en las farmacias y aprobados para otros usos debe ahorrar tiempo y dinero.
Muchos de los procesos de estas enfermedades son paralelos a los de los tumores de cáncer, lo que sugiere que las tenias pueden ser susceptibles a tratamientos contra el cáncer, tales como la supresión de la división celular y la prevención de la replicación del ADN. Cuando el equipo compiló una lista de la mayoría de los objetivos probables para el tratamiento de drogas, muchos eran los mismos objetivos que las quimioterapias de cáncer existentes.
La combinación de los conocimientos biológicos con el genoma completo también reveló otros objetivos prometedores para los medicamentos existentes. Con el tiempo, las tenias han perdido la capacidad de sintetizar las grasas necesarias y colesterol, cruciales para el desarrollo de las larvas y, en su lugar, limpian y modifican los de sus anfitriones. Los genes más activos de la tenia son centrales en este importante proceso de barrido, ya que producen las proteínas que se unen o las grasas precursoras de las proteínas de unión a ácidos grasos, por lo que la interrupción de estas proteínas con los medicamentos actuales puede ser un tratamiento efectivo.
«Hemos desarrollado un nuevo método para hacer crecer células de tenia en el laboratorio y estamos investigando estas células frente a la mayoría de los tratamientos farmacológicos potenciales identificados en los genomas», explicó el profesor Klaus Brehm, coautor de la Universidad de Würzburg, Alemania. «Esperamos poder ser capaces de identificar y validar los candidatos actuales de drogas para aliviar la carga de esta enfermedad debilitante», agrega.
Además, el equipo descubrió por qué otros tratamientos han fracasado. Por ejemplo, la orientación de las acetilcolinesterasas (enzimas presentes en el sistema nervioso central) ha tenido éxito en el tratamiento de la malaria y gusanos trematodos, pero fue ineficaz contra las tenias porque la producción de acetilcolinesterasas es sorprendentemente baja en los quistes de tenia.
En una especie de tenia, el equipo logró reunir esencialmente cromosomas completos y esto reveló una organización similar cromosómica con los trematodos lejanamente relacionados. La calidad y el alto nivel de la secuencia genómica en este estudio también permitió al equipo examinar las pérdidas y ganancias genéticas evolutivas de tenias, dotándolos de cientos de objetivos potenciales para las drogas y la eliminación de aquellos que tienen pocas probabilidades de trabajar contra la infección por tenia.
«Tenemos que aprovechar estos datos de secuencias genéticas para encontrar nuevas y mejores formas de hacer frente a este problema que asola gran parte del mundo desarrollado y en desarrollo», dijo el profesor Peter Hotez, decano de la Escuela Nacional de Medicina Tropical del ‘Baylor College of Medicine’ y editor jefe de la revista ‘Plos Neglected Tropical Diseases’. «El libre acceso a estos genomas completos acelerará el ritmo en el que encontramos herramientas alternativas y tratamientos para combatir las infecciones por cestodos», concluye. Europa Press.