Más de 12 millones de personas están en la actualidad en riesgo de pobreza y/o exclusión social en España y se estima que 4,2 millones viven en pobreza extrema, según los últimos datos del Informe AROPE sobre el estado de la Pobreza en España. Atender las necesidades y cuidar de esta población es un trabajo por el que las administraciones deben apostar y trabajar para eliminar las desigualdades y mejorar la calidad de vida de estas personas. Con motivo del Día Internacional del Voluntariado, que se celebra este martes, 5 de diciembre, el Instituto Superior de Formación Sanitaria (Isfos) del Consejo General de Enfermería ha organizado un webinar informativo sobre voluntariado enfermero con la colaboración de la ONG de la Organización Colegial de Enfermería, Solidaridad Enfermera.
Bajo el título “Compromiso social más allá de lo asistencial”, expertos en la materia han analizado la situación actual y han explicado cual es el papel fundamental desde el punto de vista de la enfermería en la mejora de salud y de la calidad de vida de los colectivos más vulnerables desde la profesión a todas estas personas vulnerables. “Si ya de por sí somos una profesión muy vocacional, en este webinar podemos comprobar cómo hay compañeros y compañeras que deciden ir un paso más allá implicándose con el esfuerzo que conlleva. A pesar de que las cifras van mejorando año tras año, todavía la ayuda de las administraciones resulta insuficiente y la labor de estas enfermeras voluntarias es aún más importante en el día a día de estas personas”, afirma Pilar Fernández, directora de ISFOS.
Solidaridad Enfermera cuenta actualmente con más de 20 acuerdos de colaboración con entidades locales en el ámbito nacional, con proyectos dirigidos a población migrante, ancianos en situación de soledad no deseada, mujeres, adolescentes y niños vulnerables y barrios y zonas de escasos recursos.
Iniciativas
Tal y como explica la enfermera responsable de la ONG, Isabel Abero, “en 2023 el número de voluntarios y voluntarias ha aumentado un 27% con respecto al año anterior”. “Buscamos dar soporte a iniciativas solidarias enfermeras y canalizar su compromiso social. Las enfermeras y enfermeros tenemos un enorme potencial como agentes de cambio y trasformación social, así como un papel fundamental en la mejora de salud y de la calidad de vida de los colectivos más vulnerables. La profesión enfermera cuenta con un enfoque global de salud, con conocimientos y herramientas propios que sirven para identificar las necesidades sociosanitarias del entorno y diseñar acciones que contribuyan a mejorar la situación de vulnerabilidad a la que se enfrentan muchas personas a lo largo de su vida”, puntualiza.
Desde la ONG se han sumado al plan de acción marcado por la Agenda 2030, comprometiéndose al gran esfuerzo global en línea con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), centrando sus acciones especialmente en el bienestar de las personas, teniendo en cuenta los determinantes sociales y los recursos sociosanitarios del entorno, priorizando actualmente el ámbito nacional.
Papel enfermero
Natalia Rodríguez, presidenta del Colegio de Enfermería de Santa Cruz de Tenerife y delegada de Solidaridad Enfermera Tenerife, ha comentado cuál es el papel de la enfermería en el voluntariado y ha expresado que desde la profesión “se cuenta con un capital humano importante y un compromiso social, además de tener competencias para aportar a la sociedad no solamente desde una parte asistencial, sino también desde una más comprometida, más social…”. “Podemos hacer educación para la salud, formación para profesionales para la mejora de personas en riesgo de exclusión social. Lo importante para ser una enfermera voluntaria es tener ese compromiso. Hay que tener tiempo, pero también compromiso porque esto va más allá de la función asistencial, el sentir que su acción puede hacer cambiar algo y tener ganas de formar parte de ese cambio”, ha resaltado.
En esta misma línea se ha mostrado Inmaculada Martínez que, como vicepresidenta del Colegio de Enfermería de Almería y delegada de Solidaridad Enfermera Almería, ha puntualizado la importancia de tener ese compromiso con las personas más vulnerables. “Debemos ser sensibles y el compromiso con la sociedad podemos hacerlo por distintas vías y una de ellas es el voluntariado. A nivel personal, la satisfacción de saber que con nuestra implicación nos acercamos a la realidad y aportamos nuestro granito de arena a la sociedad para la mejora de la salud de la población vulnerable. A nivel profesional, explorar otros cambios aparte de lo asistencial también nos aporta muchos beneficios”, ha comentado.
Por su parte, Manuel Trabado, delegado de Solidaridad Enfermera Granada, ha subrayado que para ser enfermera voluntaria “tiene que nacer de dentro”. “Cuando uno lo siente, realmente es un motor que te hace hacer cosas. Creo que tiene un punto de enganche porque vas haciendo cosas y te apetece hacer más. Los voluntarios saben lo que tienen que hacer, en nuestra ONG todos los voluntarios son maestros en la materia y hay que dejar que ellos manifiesten sus potencialidades”, ha concluido.
En definitiva, todos los enfermeros y enfermeras que siendo conscientes de las problemáticas actuales y de su impacto en la población más vulnerable quieran colaborar con Solidaridad Enfermera pueden hacerlo. Desde Solidaridad Enfermera se coordinan, gestionan y diseñan las diferentes líneas enmarcadas en sus líneas de trabajo, en colaboración con las delegaciones provinciales, lideradas por los colegios de Enfermería de cada provincia. Tal y como se expone desde la ONG, “tu compromiso voluntario y un poco de tiempo permitirán que se puedan llevar a cabo actividades y acciones que servirán para que más personas mejoren su salud y su calidad de vida”. ISFOS/CGE