La Plataforma de empresas suminstradoras de la Sanidad de la Comunitat Valenciana ha anunciado que muchos de sus integrantes están a punto de cerrar o iniciar despidos masivos debido a los impagos del Consell. En una nota de prensa publicada por dicha plataforma aseguran que «las empresas no podemos vivir sin cobrar. Hemos intentado mantener una actitud responsable y consecuente con las circunstancias del momento. Todos nuestros comunicados han sido respetuosos y encaminados a dejar patente la existencia de un problema que si no se contempla y se soluciona puede dar al traste con un gran número de empresas y un gran número de puestos de trabajo. Solo con las empresas de la Plataforma, serían unos 770 puestos los que estarían en peligro».
Los integrantes de esta plataforma han mantenido ya diversas reuniones con los repsonsables del Consell sin resultado práctico por lo que su situación económica ha ido empeorando con el paso de los meses. «Lamentablemente, después de todo esto, lo único que hemos conseguido, es que de vez en cuando alguien se siente con nosotros y escuche nuestras reclamaciones y peticiones. Nunca se ha tenido en cuenta ninguna de las propuestas que hemos realizado y siempre nos hemos encontrado con la misma respuesta: No tenemos dinero, estamos en una situación muy difícil y estamos haciendo esfuerzos por conseguir la financiación que se necesita. No hay plazos ni soluciones concretas», aseguran los proveedores.
Esta plataforma critica la falta de ecuanimidad a la hora de repartir los escaso fondos que ha ingresado la Generalitat. Concretamente sus acusaciones van contra la Conselleria de Hacienda por «la forma que tiene la Consellería, concretamente el Sr. Vela, de establecer las prioridades ante una situación como la que nos encontramos, estima prioritario devolver el dinero a quién se lo ha prestado -Retenciones y S.S.- que antes de hacerlo llegar a unas empresas que están agónicas y sin financiación, porque una vez más tenemos que dejar patente que en este momento los bancos brillan por su ausencia».
Uno de los problemas más graves que tienen estas empresas a la hora de hacer ori su voz en la sociedad es el desconocimiento que, según ellos, tiene el público sobre su actividad y la importancia de su papel en el estado del Bienestar. «Estimamos -afirman en una nota de prensa- que nuestro problema es equivalente al que están sufriendo las farmacias, pero dado que nosotros no tenemos un contacto directo con la sociedad, nuestro problema no tiene la misma repercusión social. La gente tiene que saber que somos nosotros los que estamos soportando a nuestras espaldas el que los hospitales y centros de salud funcionen, somos nosotros los que estamos financiando día a día las necesidades de la mayoría de productos que se necesitan para mantener un estado de bienestar. La gente tiene que saber que nosotros al igual que las farmacias, no podemos ponernos de huelga, ni podemos dejar de suministrar».
A principios de mes la Plataforma de Proveedores envío un burofax al ministro de Hacienda, Cristobal Montoro, explicandole su situación y exigiendole que los próximos fondos de ayuda al pago de proveedores de la Generalitat tengan en cuenta la precaria situación de este colectivo empresarial. COECS.