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MAPFRE ANALIZA EL COSTE ECONÓMICO DE LOS ACCIDENTES EN MAYORES DE 65 AÑOS

por Admin

¿Qué coste social y económico tienen los accidentes de las personas mayores de 65 años para la sociedad? A esta pregunta ha querido responder la Fundación Mapfre con un extenso estudio económico que ha publicado a través de su Instituto de Salud, prevención y medio Ambiente.

Este estudio económico ha requerido una gran documentación basada en todo tipo de acontecimientos sanitarios relacionados con accidentes de personas mayores de 65 años, intervenciones quirúrgicas, transporte sanitario, prótesis, estancias hospitalarias o pruebas diagnósticas entre otras variables. El trabajo se integra en la iniciativa Con mayor cuidado, cuyo fin es prevenir los accidentes en mayores.

También se han tenido en cuenta en el cómputo los costes adicionales indirectos como son los días de baja laboral, la contratación de personal para asistencia a los heridos, etc. Mediante la recopilación de datos facilitados por el Ministerio de Sanidad y una encuesta a más de 1.000 personas la Fundación Mapfre ha podido calcular con un pequeño magen de error el coste final de la asistencia a los mayores de 65 años en nuestro país.

Mediante un sistema de costes matemático se han podido calcular, por ejemplo, que las roturas de cadera -22.000 al año en esta franja de edades- suponene un coste medio de más de 8.400 euros por paciente y un total de casi 45 millones de euros de coste para la sanidad (independientemente de que el tratamiento y la recuperación se realice en la sanidad pública o privada).

Actualmente, en España hay más de 8 millones de personas mayores de 65 años. En este grupo de edad se producen casi 300.000 accidentes al año que requieren asistencia médica, lo que origina unos costes de 423 millones de euros anuales, equivalentes al 0,5 por ciento del gasto sanitario total.

El estudio, realizado entre 2008 y 2011, analizó con una encuesta telefónica los datos de 1.002 personas mayores de 65 años, entre los que se recogieron datos de 1.100 accidentes que requirieron asistencia. «Las cifras obtenidas son prudentes y ajustadas, pero deben entenderse como una aproximación a una realidad más compleja», dice Alfredo del Campo, autor del estudio.

Las heridas son las lesiones más frecuentes entre los mayores accidentados y el gasto que genera su asistencia asciende a poco más de 10 millones de euros

Resultados

La tasa de accidentabilidad obtenida, del 14,6 por ciento, es menor que la registrada en otros estudios por las restricciones establecidas -en edad y necesidad de intervención médica-. A tenor de los resultados, los accidentes registrados -en su mayoría provocados por caídas- requirieron un promedio de 4,3 acciones hospitalarias, y el 71 por ciento de los percances produjeron fracturas, heridas, esguinces… y el 56 por ciento, secuelas posteriores.

Las consecuencias clínicas más comunes son las heridas, que, a su vez, son las que menos costes originan, con un gasto de 10.148.007 euros, en comparación con la fractura de cadera, de 150 millones.

El coste más importante es el derivado de la hospitalización, los ingresos en urgencias, las intervenciones quirúrgicas, los diagnósticos por imagen, los tratamientos y rehabilitación de las fracturas de cadera, y otros diagnósticos del aparato musculoesquelético. «Del total, 381 millones son costes directos y 37 derivados de rehabilitación y fisioterapia. Los costes indirectos suponen el 10 por ciento del total, ya que se trata de un colectivo en el que no hay, por lo general, bajas laborales. Por tanto, si se retrasa la edad de jubilación, aumentarán los costes indirectos por pérdida de actividad laboral».

Según las conclusiones, la necesidad de reducir el gasto no debería venir únicamente motivada por el ahorro económico sino por el de sufrimiento y de pérdidas humanas. Del Campo insiste en la necesidad de sensibilizar a la población, a los sanitarios y a la Administración, e implantar planes de prevención. En ello coincide José Manuel Ribera Casado, catedrático emérito de Geriatría de la UCM, quien resalta que es importante prevenir los accidentes, «que generan complicaciones de salud y, a veces, mortalidad, conociendo los factores de riesgo».

«La mayoría de los accidentes en todas las edades son evitables si se actúa sobre los factores de riesgo para eliminar y reducir sus consecuencias», concluye Antonio Guzmán, director general del Instituto de Prevención, Salud y Medio Ambiente de la Fundación Mapfre.

Las cifras de la accidentalidad en ancianos

Se producen más de 820 accidentes diarios, que necesitan asistencia en mayores de 65 años. n El gasto directo de los accidentes es de más de 380 millones, y el indirecto de 43 millones. n Una reducción del 10 por ciento de los accidentes supondría un ahorro de 42 millones de euros cada año. n Las tasas de accidentabilidad se incrementan progresivamente con la edad; el grupo de mayor riesgo es el de 81 a 85 años.

De los 300.000 accidentes analizados, el 83,4 por ciento fueron caídas. n Las mujeres, con un 61 por ciento, se accidentan más que los hombres, con un 39 por ciento. n En la población estudiada se registraron 22.200 fracturas de cadera, cuya asistencia sanitaria ascendió a 150 millones de euros. n La rotura del fémur supone 66 millones; y 34 las de brazos y hombros.  G.Ferrándiz/COECS/DM

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