Los miembros de la Junta de Gobierno del Colegio Oficial de Enfermeros y Enfermeras de Castrellón (COECS).
- Desde el COECS queremos informar a la sociedad del riesgo que corren las enfermeras escolares al atender a nuestros jóvenes y de la pérdida de calidad asistencial que se producirá en los Centros de Atención Primaria
- Desde el Colegio Oficial de Enfermeros y Enfermeras de Castellón consideramos que provocará un aumento de las listas de espera en los centros de salud en los que se extraigan las enfermeras referentes escolares
- La Conselleria da instrucciones para que se implante la figura de la Enfermera de referencia escolar, sin tener en cuenta que va a suponer una sobrecarga de trabajo para el personal de Enfermería de Atención Primaria, ya que en ningún caso se van a contratar más enfermeras
CASTELLÓN (2024-9-13) Desde la Junta de Gobierno del Colegio Oficial de Enfermeros y Enfermeras de Castellón queremos aclarar que la Enfermería Escolar en la Comunidad Valenciana fue uno de los objetivos básicos del Consejo de Enfermería de la Comunidad Valenciana (CECOVA), por ser un pilar fundamental de educación para la salud y de apoyo a la recuperación de la misma para nuestros escolares, quienes actualmente se encuentran en una situación de desamparo sanitario dentro de la institución educativa de su centro.
Por ello, después de varios análisis y observando esta necesidad de asistencia a nuestros jóvenes, el CECOVA decidió instaurar esta figura en la Comunidad Valenciana para hacer visible a la sociedad política el abandono y la necesidad de su implementación en los colegios, tanto de educación especial. como reglada, todo ello a carga económica del CECOVA.
Desde la Organización Colegial, vimos con gran alegría la implicación que, poco a poco, fue teniendo la figura de la enfermera escolar, gracias al interés mostrado por varios ayuntamientos de nuestra comunidad, siendo ellos los que asumieron el soporte económico de la figura de la Enfermera Escolar.
Nuestro objetivo fundamental continúa siendo que todos los colegios, indistintamente de si son públicos, concertados o privados, cuenten con la figura de un profesional de enfermería para evitar los perjuicios en salud que nuestros jóvenes puedan sufrir. En relación con estos objetivos, durante un largo período de tiempo, hemos estado reuniéndonos con la Conselleria de Sanidad para hacerle ver la necesidad de institucionalizar esta figura en todos los centros escolares, tomando la propia Conselleria la responsabilidad de esta asistencia.
Hasta ahora, solo hemos recibido buenas palabras por parte de aquellos partidos políticos que han estado en la oposición, pero lo cierto es que, cuando llegan al poder después de unas votaciones en las que prometen una Sanidad Universal y para todos, se olvidan de todo lo prometido.
Durante el año 2024, recibimos la noticia de que un sindicato había firmado que la Enfermería Escolar sería una realidad en todos los centros de la Comunidad Valenciana y que se iban a contratar 300 enfermeras escolares para llevar a cabo dicho proyecto. Desde la Organización Colegial, desde un principio, fuimos escépticos ante esta noticia, pensando que podría tratarse más de un acuerdo propagandístico de los firmantes.
Durante esta semana, se realizó una reunión entre un sindicato y personal de enfermería involucrado en la Enfermería Escolar, donde se informó del fracaso y del incumplimiento de promesas, una vez más, por parte de la administración, dejando entrever que la firma de compromiso para el proyecto de la Enfermería Escolar no tenía ninguna validez.
Como contrapartida, la Conselleria da instrucciones para que se implante la figura de la Enfermera de referencia escolar, sin tener en cuenta que esto va a suponer una sobrecarga de trabajo para el personal de Enfermería de Atención Primaria, ya que en ningún caso se van a contratar más enfermeras para ser la referencia escolar.
Por todo ello, y ante estas tristes noticias, desde el COECS queremos informar a la sociedad del riesgo que corren las enfermeras escolares al atender a nuestros jóvenes, y de la pérdida de calidad asistencial que se producirá en los Centros de Atención Primaria, lo que provocará un aumento de las listas de espera en dichos centros.
