La Organización Mundial de la Salud pone el dedo en la llaga en el Día Mundial de la Hipertensión -que se celebra hoy- alertando del incremento de esta dolencia a la categoría de pandemia. Según la OMS este problema de salud, que puede derivar en afecciones muy graves, afecta ya a 1.000 millones de habitantes del planeta.
Desde la OMS explican que «uno de los factores de riesgo clave de las enfermedades cardiovasculares es la hipertensión (tensión arterial elevada). La hipertensión, que afecta ya a mil millones de personas en el mundo, puede provocar infartos de miocardio y accidentes cerebrovasculares». De hecho, los investigadores en este área de la salud calculan que la hipertensión es la causa por la que mueren anualmente nueve millones de personas.
Por ello la OMS ha publicado un extenso informe sobre la dolencia que se puede descargar directamente en su web. El documento de la OMS de información sobre la hipertensión en el mundo busca contribuir a los esfuerzos de todos los Estados Miembros para elaborar y aplicar políticas dirigidas a reducir la mortalidad y la discapacidad que causan las enfermedades no transmisibles. La prevención y el control de la hipertensión son piedras angulares para ello.
La directora general de la OMS, Margaret Chan, ha señalado en el informe que «la hipertensión es una enfermedad letal, silenciosa e invisible, que rara vez provoca síntomas. Fomentar la sensibilización pública es clave, como lo es el acceso a la detección temprana. La hipertensión es un signo de alerta importante que indica que son necesarios cambios urgentes y significativos en el modo de vida. Las personas deben saber por qué el aumento de la tensión arterial es peligroso, y cuáles son los pasos para controlarla. También deben saber que la hipertensión y otros factores de riesgo como la diabetes a menudo aparecen juntos».
Por ello Chan pide que los estados se impliquen en la lucha contra esta pandemia de forma activa. «Para aumentar este conocimiento, los países deben disponer de sistemas y servicios para promover la cobertura sanitaria universal y apoyar modos de vida saludables: adoptar un régimen alimentario equilibrado, consumir menos sal, evitar el uso nocivo del alcohol, realizar ejercicio físico regularmente y no fumar», dice la secretaria general.
Las cifras en España
En un rciente informe de la Sociedad Española de Hipertensión se indica la extensión que está adquiriendo esta dolencia en nuestro país. Según los expertos de la SEH-LELHA «los estudios de prevalencia señalan que la hipertensión arterial afecta en España a aproximadamente el 40% de la población, porcentaje que supone una cifra de casi 14 millones de hipertensos». Además, según señaló el doctor Francisco Morales, miembro de la Junta Directiva de la SEH-LELHA, “estas cifras se incrementan en las personas mayores. A modo de ejemplo, existen estudios que muestran que más del 85%de las personas con más de 65 años son hipertensos”.
En este sentido la SEH-LELHA ha manifestado la impotancia que tiene las enfermeras en la lucha contra la hipertensión. «Es indudable el papel que la enfermería ocupa como proveedor de cuidados a las personas con hipertensión y riesgo cardiovascular. Entre estos cuidados se encuentra el tratamiento no farmacológico, es decir, de los cambios en los hábitos de vida», explican desde esa asociación científica. “Nuestro papel es el de fomentar el ejercicio prescrito para conseguir resultados que inciden sobre el mantenimiento o aumento de la calidad de vida”, ha explicado Josep Mª Gutiérrez, miembro de la Junta Directiva de la Asociación Española de Enfermería de Hipertensión y Riesgo Cardiovascular (EHRICA).
Según este experto «la enfermería aborda al paciente de una forma global teniendo en cuenta otros problemas presentes en las personas ya sea mediante intervenciones propias o en relación con el resto del equipo de profesionales que hacen que la adherencia terapéutica pueda verse incrementada”. G. Ferrándiz/COECS.